jueves, 21 de septiembre de 2017

Ecco the Dolphin (Mega Drive)



Hoy vamos a hablar de un clásico que vio la luz en las consolas de Sega, uno de los juegos más originales que hemos podido ver, que innovó como ningún otro en cuanto a jugabilidad, además de contar con unos de los mejores apartados gráficos en la consola de 16 bit de Sega.





El juego fue desarrollado por la compañía húngara Novotrade International y lanzado al mercado en 1992. Tuvo versiones para Master System, Game Gear, Mega Drive y Mega Cd, siendo ésta última la mejor gracias a la mayor potencia que disponía el periférico. Sin embargo vamos a analizar la de Mega Drive, que es la versión original de la que partieron las demás. 

En su día, este videojuego se trató de un título innovador, donde podíamos explorar libremente los océanos en un fascinante mundo abierto submarino plagado de peligros.


 


El juego nos pone en la piel de Ecco el delfín. Al inicio de la partida vemos como aparece nadando tranquilamente con los demás delfines de su manada, hasta que de repente algo comienza a ir mal. Aparece un vórtice alienígena que empieza a abducirlos, siendo Ecco el único que consigue salvarse. Con esta completa locura de premisa comienza uno de los mejores juegos que ha tenido la consola.


Se trata de un juego en 2D con movimiento lateral, no obstante, al desarrollarse en el mundo subacuático, podemos avanzar en el eje vertical del mismo modo que en el horizontal, añadiendo así la exploración subacuática en un auténtico alarde de originalidad. El juego sustituía la clásica barra de energía por dos barras que indicaban el nivel de oxígeno que tenía Ecco y el hambre que pasaba, de modo que al ser heridos, ambas empezaban a bajar debiendo ser repuestas para evitar morir, cosa que sucedía en cuanto cualquiera de las dos barras bajase por completo.


Cuanto más descendiésemos por las profundidades, mayor era el peligro de quedarse sin oxígeno, por lo que era primordial buscar bolsas de aire por el entramado de cavernas que había en el juego. Además, Ecco disponía de un sistema de sonar, que podíamos utilizar tanto para orientarnos como para hablar con las criaturas marinas y escuchar sus consejos. Otra utilidad que tenía era la de activar unos cristales submarinos que podían darnos pistas o hacer de llave para desbloquear caminos por los que seguir nuestra exploración.





El juego consistía en ir explorando las cavernas submarinas para ir encontrando a los delfines atrapados en ellas y liberarlos. El nivel de personajes que tenía el juego se dividía entre aliados y enemigos. Los personajes que nos ayudaban eran orcas asesinas y delfines amigos de Ecco que iban dándonos pistas, en cambio el elenco de enemigos era muy superior, yendo desde medusas hasta pulpos gigantes, pasando por los malvados tiburones o los alienígenas que querían invadirnos.   






El juego de por sí es, posiblemente, uno de los juegos más difíciles que había en la consola de Sega. Por lo que el jefe final del juego no iba a ser menos, este enemigo estaba claramente inspirado en los xenomorfos de la película "Alien", y para acabar con él teníamos que ir destruyéndolo poco a poco eliminando varias partes de su cabeza.


Esto es todo por ahora, recordad que podéis preguntar cualquier duda tanto en los comentarios, como en Twitter: @Lepra_Gameso en la página de Facebook: Lepra Games.

Un saludo.

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